Ya he probado las prisas
el sexo exprés y los amores precipitados
la abolición de los preliminares
los ombligos pasajeros
los te quiero a primera vista
los cuerpos fugaces
las bodas en las vegas
las cremalleras atropelladas
me enamore de desconocidas
y las desquise a contrarreloj.
Ya no quiero eso.
Necesito un amor a fuego lento.
1 comentario:
Es como las comidas: cada relación tiene tu tiempo propio de cocción. Y cuando digo relación, hablo de cualquier relación: familiar, amistad, pareja, amantes... El secreto es descubrir a que intensidad poner la hornalla.
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